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Finanzas

Emprender en México no es un camino de rosas, pero tampoco es imposible. Muchas de las grandes marcas que hoy conocemos arrancaron con una idea chiquita, un sueño enorme y, claro, un dinerito extra para darle vida.&nbsp;&nbsp;Las ganas son clave, pero no siempre alcanzan para comprar insumos, pagar un local o anunciarse. A veces, lo que realmente necesitas es un empujón financiero para despegar. Y ahí es donde un préstamo personal puede hacer toda la diferencia.&nbsp;Si estás pensando en abrir tu negocio o ya tienes uno, pero necesitas meterle turbo, un préstamo personal bien usado puede ayudarte a crecer sin quedarte en ceros. Eso sí, la clave está en hacerlo con estrategia y sin volverse loco con las deudas. Vamos a ver cómo sacarle el mayor provecho.&nbsp;&nbsp;<h2>Empezar sin esperar a tener millones&nbsp;</h2>Uno de los errores más comunes es pensar que necesitas una fortuna para emprender. La realidad es que muchos negocios exitosos nacieron con poco, pero con inversiones inteligentes.&nbsp;&nbsp;Hay miles de historias de gente que empezó vendiendo desde su casa o con un pequeño local y, con el tiempo, lograron crecer. Si ya tienes una idea clara, pero el dinero es lo que te detiene, un <a href="https://www.bineo.com/prestamo-bineo">préstamo personal</a> puede ayudarte a:&nbsp;<ul><li>Comprar equipo o herramientas clave: Ya sea que necesites una computadora, una cafetera profesional o maquinaria para producir, un buen equipo hace la diferencia&nbsp;</li><li>Pagar insumos o materia prima: No puedes vender pasteles sin ingredientes, ni ropa sin tela. Con un capital inicial, puedes abastecerte bien y vender sin problemas&nbsp;</li><li>Rentarte un local o mejorar tu espacio de trabajo: Aunque muchos negocios arrancan en casa, hay quienes necesitan un lugar físico para operar. Un préstamo te puede ayudar a pagar la renta o hacer adecuaciones necesarias&nbsp;</li><li>Invertir en publicidad: No importa qué tan bueno sea tu producto si nadie lo conoce. Un dinerito para redes sociales o una campaña de publicidad puede ayudarte a atraer clientes rápido&nbsp;</li></ul>&nbsp;<h2>Cuando ya emprendiste, pero necesitas un impulso&nbsp;</h2>Tal vez ya diste el primer paso y vendes bien, pero notas que podrías crecer más rápido si tuvieras un poco más de capital. Un préstamo personal también es una excelente opción para los que ya emprendieron y quieren llevar su negocio a otro nivel.&nbsp;<ul><li>Expandir tu negocio: Tal vez comenzaste vendiendo desde casa, pero ahora podrías abrir un punto de venta o contratar a alguien que te ayude a crecer&nbsp;</li><li>Cubrir gastos temporales: Si tienes un negocio estacional, hay meses en los que necesitas un respaldo para mantenerte a flote&nbsp;</li><li>Digitalizarte: Tener redes sociales ya no es opcional, pero también puedes invertir en una tienda en línea o mejorar tu logística para envíos&nbsp;</li></ul>En México, los pequeños negocios son la base de la economía. Hay emprendedores que arrancan con pocos recursos, pero los que logran crecer son los que saben usar bien su dinero.&nbsp;&nbsp;Un préstamo puede ayudarte a no frenar tu crecimiento justo cuando estás agarrando vuelo.&nbsp;&nbsp;<h2>Cómo usar un préstamo sin morir en el intento&nbsp;</h2>Tener dinero extra suena tentador, pero un préstamo solo funciona si lo usas con inteligencia. Antes de pedirlo, ten claro lo siguiente:&nbsp;<ol><li>Calcula exactamente cuánto necesitas: No pidas de más por si las dudas, ni de menos porque luego no te va a alcanzar&nbsp;</li><li>Haz un plan detallado: Define en qué vas a gastar el dinero y cómo vas a generar ingresos para pagarlo&nbsp;</li><li>Elige bien tu préstamo: Hay muchas opciones, pero necesitas una que tenga buenas tasas, plazos flexibles y que no te pida mil papeles. (Como la de bineo, ejem ejem...)&nbsp;</li><li>No lo uses para cosas personales: Un error común es pedir el préstamo para el negocio y terminar gastándolo en otras cosas. Lleva un control estricto&nbsp;</li></ol>&nbsp;<h2>El Préstamo bineo: tu aliado para emprender&nbsp;</h2>Si ya te decidiste a darle un empujón a tu negocio, en bineo tenemos un préstamo personal hecho para ti: 100% digital, sin filas, sin rollos y sin esperar semanas para que te lo aprueben. Lo pides desde tu celular y te depositamos de volada para que puedas usarlo en lo que necesitas.&nbsp;<ul><li>Puedes solicitar desde $5,000 MXN hasta $200,000 MXN&nbsp;</li><li>No tiene comisión por apertura&nbsp;</li><li>Plazos flexibles de 6 a 24 meses para que pagues sin presión&nbsp;</li><li>Solo necesitas comprobar ingresos mínimos de $5,000 MXN brutos al mes&nbsp;</li></ul>Emprender no es fácil, pero si sabes moverte, se puede. Un préstamo bien aprovechado no es una deuda, es una inversión en tu futuro.&nbsp;&nbsp;Si todavía no tienes cuenta, abrirla es rápido y sin enredos. Y si ya formas parte de bineo, ¿qué esperas? Tu préstamo está a unos clics de distancia.&nbsp;<a href="https://bineo.onelink.me/lFnc/blog01">Descarga la app y solicita tu préstamo</a> hoy mismo.&nbsp;Así que deja de esperar "el momento perfecto". Si tienes una idea o un negocio en marcha, el momento de hacerlo crecer es ahora. Y si necesitas un empujoncito, aquí estamos para apoyarte.&nbsp;

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Un préstamo personal: el empujón que tu emprendimiento necesita 

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Seguridad

Un día estás revisando tu celular y al siguiente... ¡pum! Te llegan cobros raros, tu cuenta está bloqueada o de repente “te ganaste un premio” que jamás pediste.&nbsp;Te damos la bienvenida al mundo de los ciberataques, donde un solo clic puede meterte en un problemón.&nbsp;&nbsp;¿Has recibido un email sospechoso, un mensaje de “soporte técnico” que no pediste o un link dudoso? Ojo, podrías haber caído en la trampa. Aquí te contamos los tipos de ciberataques más comunes para que no te agarren en curva. &nbsp;<img src="https://cdn-prd.bineo.com/bineo-site-232/assets/Infografia_diciembre2024_00b28de04b.jpg" alt="ciberataque">

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Phishing, malware y más: ¿Cómo saber si fuiste víctima de un ciberataque?

Fer, como cualquiera de nosotros, pensó que su primera tarjeta de crédito era la llave dorada a la adultez financiera. Se imaginó acumulando puntos, aprovechando meses sin intereses y manejando su dinero con la maestría de un experto… pero la realidad tenía otros planes. Esto nos cuenta Fer:&nbsp;&nbsp;Todo empezó un martes cualquiera cuando mi yo del pasado, ingenuo y emocionado, recibió su primera tarjeta de crédito.&nbsp;&nbsp;Me sentía como adulto responsable, listo para conquistar el mundo financiero. La realidad me aterrizó de un golpe y me hizo ver que manejar una tarjeta de crédito sin información es como meterse a un laberinto sin mapa.&nbsp;&nbsp;<h2>No es dinero gratis, aunque se sienta así&nbsp;</h2>El primer error fue creer que la tarjeta era como un baúl sin fondo. "Pagaré después", me decía mientras pasaba la tarjeta para comprar cosas que ni necesitaba: una suscripción a un servicio de streaming que jamás usé, una chamarra carísima que aún tenía la etiqueta meses después y cenas en restaurantes elegantes para impresionar a mis amigos.&nbsp;&nbsp;Un mes después, la factura llegó y con ella, el primer dolor de cabeza... Aprendí a la mala que no es dinero extra, es dinero prestado y hay que regresarlo (con intereses si te pasas de listo).&nbsp;&nbsp;Ahora, antes de comprar, me pregunto: ¿realmente lo necesito? ¿Puedo pagarlo sin endeudarme?&nbsp;<h2>&nbsp;</h2><h2>El pago mínimo es una trampa sutil&nbsp;</h2>Cuando vi mi estado de cuenta, noté un pequeño detalle: había un "pago mínimo" bastante tentador. "Solo debo pagar esto y sigo adelante", pensé.&nbsp;&nbsp;Grave error. Pronto descubrí que pagar solo el mínimo es como querer vaciar una alberca con una cucharita en tiempo de lluvia. La deuda no solo no desaparece, sino que crece mes a mes.&nbsp;&nbsp;Aprendí que los intereses pueden convertir una simple compra en una pesadilla.&nbsp;Ahora siempre pago el total para evitar intereses y si alguna vez no puedo, hago pagos mayores al mínimo para reducir la deuda lo más rápido posible.&nbsp;&nbsp;<h2>La fecha de corte y la de pago no son lo mismo&nbsp;</h2>La confusión reina cuando no entiendes estos términos. Recuerdo un mes en el que pagué después de la fecha de pago y me cayó un interés que todavía me duele en el alma.&nbsp;&nbsp;Pensaba que la fecha de corte y la de pago eran lo mismo, pero no: la fecha de corte es cuando el banco cierra tu ciclo de compras y la fecha de pago es el último día para saldar la deuda sin generar intereses.&nbsp;&nbsp;Ahora tengo mis fechas bien anotadas, programo recordatorios en mi celular y hasta uso una aplicación que me avisa cuándo pagar. Un pequeño ajuste que me ha salvado de gastar dinero en intereses innecesarios.&nbsp;&nbsp;<h2>Los MSI pueden ser un arma de doble filo&nbsp;</h2>Los meses sin intereses (MSI) son un inventazo, pero si te emocionas, puedes llenar tu tarjeta de pagos diferidos y terminar con una mensualidad más grande que tu renta.&nbsp;&nbsp;Me pasó con una pantalla, un celular, unos audífonos y un viaje que decidí meter a MSI.&nbsp;&nbsp;Al final, tenía tantas mensualidades acumuladas que mi tarjeta se sentía como un segundo alquiler. Aprendí que hay que usarlos con cabeza y solo para compras que realmente valgan la pena, como electrodomésticos o servicios esenciales.&nbsp;&nbsp;Y, sobre todo, hay que calcular si los pagos mensuales no se comerán todo tu presupuesto.&nbsp;&nbsp;<h2>Un buen manejo mejora tu historial (y abre más puertas)&nbsp;</h2>Al principio, mi relación con la tarjeta fue turbulenta, pero con el tiempo aprendí a domarla.&nbsp;&nbsp;Descubrí que pagar a tiempo y usarla con inteligencia mejora mi historial crediticio, lo que en el futuro me ayudará a acceder a mejores créditos, tarjetas con beneficios y tasas de interés más bajas.&nbsp;&nbsp;Ahora reviso mi reporte de crédito periódicamente y me aseguro de que mi uso de la tarjeta refleje un manejo responsable. ¿Meta final? Algún día comprar una casa y no sufrir con tasas de interés altísimas por un mal historial financiero.&nbsp;Conclusión: Mi tarjeta y yo ahora somos aliados, pero solo porque entendí sus reglas. Aprendí a usarla a mi favor en lugar de que me juegue en contra.&nbsp;&nbsp;Si alguna vez pasaste por algo similar, tranqui, todos hemos estado ahí. Lo importante es aprender y mejorar. Ahora disfruto de los beneficios sin caer en trampas. ¡Que la deuda no te agarre desprevenido!&nbsp;&nbsp;<h2>Los beneficios que ahora aprovecho al máximo&nbsp;</h2>Después de aprender a manejar mi tarjeta, descubrí que también tiene muchas ventajas cuando se usa de manera inteligente:&nbsp;<ul><li>Cashback y recompensas: Ahora uso una tarjeta que me devuelve un porcentaje de mis compras, lo que significa que cada gasto me regresa un poco de dinero o puntos que puedo cambiar por descuentos o boletos de avión&nbsp;</li><li>Compras protegidas: Algunas tarjetas incluyen seguros contra robo o daño en productos comprados con ellas. Esto me ha salvado cuando tuve un problema con una compra en línea&nbsp;</li><li>Acceso a preventas y promociones: Desde boletos de conciertos hasta descuentos exclusivos en tiendas, mi tarjeta me da acceso a promociones que antes ni sabía que existían&nbsp;</li><li>Construcción de historial crediticio: Al pagar a tiempo y no abusar del crédito disponible, mi historial ha mejorado y ahora puedo acceder a mejores tasas y beneficios en otros productos financieros&nbsp;</li><li>Facilidad para viajar: Me di cuenta de que usar la tarjeta en el extranjero es más seguro que llevar efectivo, y algunas incluso eliminan las comisiones por compras internacionales&nbsp;</li></ul><h4>&nbsp;</h4><h3>¿Y quién es Fer?&nbsp;</h3>La verdad es que Fer es un personaje que inventamos, pero lo que no es ficción es que esta historia le ha pasado a muchísimas personas. Y como te queremos mucho, queremos que te informes bien (para que no pases sustos financieros).&nbsp;Aquí estamos para ayudarte a que manejes tu lana de la mejor manera. Porque una tarjeta de crédito no debería ser un dolor de cabeza, sino una herramienta para hacerte la vida más fácil.&nbsp;&nbsp;Así que, ahora que ya tienes el mapa, úsalo a tu favor.&nbsp; &nbsp;

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Cosas que aprendí de mi tarjeta de crédito (y por qué ahora la manejo mejor)

San Valentín terminó y Ale siempre pensó que el amor estaba en el aire, que con la persona correcta todo iba a fluir sin tanto estrés. Pero la vida le dio un giro inesperado: después de varios años de relación, decidieron tomar caminos diferentes.&nbsp;&nbsp;Y aunque en ese momento parecía que el mundo se le venía abajo, pronto se dio cuenta de que había algo más que necesitaba poner en orden… sus finanzas.&nbsp;&nbsp;<h2>El principio del caos: la vida sin pareja&nbsp;</h2>Cuando Ale rompió con su pareja, no solo se enfrentó a la montaña rusa emocional (porque claro, es imposible no sentir el dolorcito en el corazón cuando todo cambia), sino que de repente, se dio cuenta de algo curioso: su dinero estaba tan compartido como las canciones de su playlist.&nbsp;&nbsp;Entre cenas, viajes y hasta el contribuir a la cuenta de streaming (sí, ese gran detalle que pasa desapercibido durante la relación), el dinero en común era una constante.&nbsp;Pero ahora, con una sola cuenta, Ale tuvo que aprender a navegar el océano de las finanzas sin tener a alguien con quien compartir los gastos.&nbsp;&nbsp;Lo que pensó que sería un golpe de realidad doloroso se convirtió en la oportunidad perfecta para tomar las riendas de su vida financiera. Y así fue como aprendió, paso a paso, a mejorar su relación con el dinero.&nbsp;&nbsp;<h2>Lección 1: La importancia del presupuesto personal&nbsp;</h2>Lo primero que notó fue que, sin su pareja, no había más pago compartido de cuentas. Ya no había esa confianza de "hoy yo pago y mañana tú".&nbsp;&nbsp;Ale tuvo que hacer un presupuesto personal realista, y no, no era solo calcular lo que gastaba en café. Se trataba de todo: desde la renta del depa hasta los gastos chiquitos como el transporte o las suscripciones que a veces, ni usaba (pero ahí seguían cobrando, como la nostalgia de su relación pasada).&nbsp;¿El truco? Poner límites, asignar un porcentaje de sus ingresos para ahorrar, otro para diversión y otro para emergencias. Sí, como cuando decides que vas a hacer una cena con amigos, pero a la hora de la hora, te das cuenta de que no hay margen para la pizza extra, ¡ni modo, a ajustar!&nbsp;Tip de Ale: "Aunque tu pareja ya no esté en la ecuación, lo más importante es ser responsable contigo. Un presupuesto bien hecho puede salvarte la vida y no solo tu cuenta bancaria."&nbsp;&nbsp;<h2>Lección 2: El poder del ahorro en solitario&nbsp;</h2>En pareja, es fácil dejar que el dinero se derrame por todos lados: una cena aquí, unas compras allá. Pero ahora, Ale se dio cuenta de que tener control sobre su dinero era crucial para su paz mental.&nbsp;&nbsp;No se trataba de que la vida fuera más cara por la soltería, sino de que, si algo pasaba, la única persona responsable era Ale.&nbsp;Así que empezó a ahorrar a lo grande. Abrió una cuenta de ahorros donde comenzó a guardar una parte fija de sus ingresos. No se trataba solo de los “ahorros por si acaso”, sino de prepararse para el futuro y poder disfrutar de las cosas sin tener que preocuparle si a fin de mes podía pagar la renta.&nbsp;¿La lección? Ahorrar no es solo para el futuro, sino para mantener la calma en el presente. Y aunque de vez en cuando se echó un buen antojo, también le dio espacio a las inversiones que le darían más tranquilidad con el tiempo.&nbsp;Tip de Ale: "El dinero no lo es todo, pero te juro que da una paz mental que no tiene precio. ¡A ahorrar, pero sin olvidarte de disfrutar la vida!"&nbsp;&nbsp;<h2>Lección 3: Controlar los impulsos y decir “no” al gasto innecesario&nbsp;</h2>Cuando Ale cortó, los amigos le recomendaron de todo: desde viajes espontáneos hasta darse esa vida nueva, con ropa nueva.&nbsp;&nbsp;Era tentador, claro. Pero Ale se dio cuenta de que, en el fondo, lo único que necesitaba era reconciliarse con la soltería, no con una tarjeta de crédito llena de compras impulsivas.&nbsp;Así que, en lugar de irse de shopping para sanar el corazón, Ale decidió poner un alto. Y es que la clave estaba en ser consciente de que no todo lo que quieres ahora es algo que realmente necesitas.&nbsp;&nbsp;Decidió seleccionar mejor sus compras y, sobre todo, se dio cuenta de lo que realmente le aportaba valor.&nbsp;¿El truco? Pensar dos veces antes de comprar algo y tener en cuenta si es una compra emocional o algo realmente necesario. ¡Adiós a la ropa que usas una vez y se queda en el fondo del armario!&nbsp;Tip de Ale: "Las compras impulsivas no curan el corazón roto, pero un buen control de gastos sí puede darle paz a tu mente."&nbsp;&nbsp;<h2>Lección 4: Vivir en el momento, pero con visión a largo plazo&nbsp;</h2>Por último, Ale aprendió a disfrutar la vida en soltería, pero siempre con un ojo puesto en el futuro. Después de todo, andar sin pareja no solo es para disfrutar el presente, sino prepararse para lo que venga.&nbsp;&nbsp;Decidió aprovechar cada oportunidad de mejorar su situación financiera, mientras se daba tiempo para lo que le gustaba: clases de yoga, viajes, y hasta una pequeña inversión en un curso de fotografía.&nbsp;¿La lección? No hay que ser genios para saber que, aunque el presente es importante, el futuro también. Y con el dinero bien administrado, ¡el futuro se ve más brillante!&nbsp;&nbsp;<h2>¿Y tú qué aprendes de esto?&nbsp;</h2>Ale ahora es más independiente que nunca, no solo en sus relaciones, sino también con su dinero. Y aunque todo comenzó como un golpe de realidad después de su ruptura, lo cierto es que terminó siendo una bendición disfrazada.&nbsp;Las finanzas, como la soltería, no siempre son fáciles, pero con las herramientas adecuadas, puedes liderar tu propio destino.&nbsp;Así que, si alguna vez te encuentras en una situación similar, no dudes en tomar el control de tu futuro financiero. A veces, lo que parece un fin, en realidad es solo el principio de algo mucho mejor.&nbsp;&nbsp;<h2>El truco extra: Organizarse con Pockets bineo&nbsp;</h2>Ale descubrió que una de las mejores formas de manejar su dinero era separarlo en diferentes bolsillos según su objetivo. Y ahí fue donde entró Pockets bineo, una herramienta que le permitió dividir su lana sin complicaciones.&nbsp;Creó un Pocket para el depa, otro para su próximo viaje, y hasta uno para esos antojos inevitables. Así, en lugar de que su dinero se mezclara y desapareciera como por arte de magia, pudo visualizar exactamente cuánto tenía para cada cosa.&nbsp;Lo mejor de todo es que <a href="https://www.bineo.com/cuenta-bineo">los pockets</a> no solo ayudan a organizar el dinero, sino que también le dan rendimiento anual del 75% CETES, lo que significa que Ale no solo estaba guardando su lana, sino que también la estaba haciendo crecer sin mover un dedo.&nbsp;

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Ale se quedó sin pareja… y esto aprendió de sus finanzas 

Abrir una cuenta en un banco digital es como invitar a alguien a tu casa sin que tenga que tocar el timbre: rápido, cómodo y sin complicaciones.&nbsp;&nbsp;Pero, así como no dejarías la puerta abierta con un letrero de “¡Pásele, aquí hay café y dinero!” (o sí, pero solo para los amigos de confianza), también es importante que te protejas con buenas prácticas de seguridad.&nbsp;Porque hoy en día, los estafadores andan más creativos que un tiktoker viral, inventándose nuevas formas de engañar con mensajes, llamadas y hasta páginas falsas.&nbsp;&nbsp;¿Cómo evitar caer en sus trampas? Fácil: con información clara, hábitos digitales seguros y un poquito de desconfianza bien administrada (porque si algo nos enseñó la vida es que no todo lo que brilla es oro… a veces es puro espejismo).&nbsp;En esta infografía te vamos a contar cómo disfrutar de bineo sin preocupaciones, con consejos prácticos y efectivos para blindar tu cuenta y tu lana. &nbsp;<img src="https://cdn-prd.bineo.com/bineo-site-232/assets/Infografia_octubre2024_315dbcb6a1.jpg" alt="Infografia octubre2024.jpg">

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Cierra la puerta al fraude 

Imagínate que tu salud financiera es como tu bienestar físico. Si tu alimentación es mala y no haces ejercicio, tarde o temprano te va a pasar factura.&nbsp;&nbsp;Pero, si le das un giro, poco a poco vas a notar un cambio enorme. Lo mejor es que nunca es tarde para empezar. Así que prepárate un cafecito (o un tecito, si lo así lo prefieres), y platiquemos sobre cómo hacer las paces con tu dinero.&nbsp;&nbsp;<h2>¿Por qué importa tanto la salud financiera?&nbsp;</h2>Tener buena salud financiera no significa que te sobre el dinero. Es más bien tener el control y no sentir que andas sin brújula en medio de un bosque.&nbsp;&nbsp;Es como ese alivio cuando terminas un pendiente gigante, todo en su lugar y tú, respirando sin estrés.&nbsp;¿Por qué es importante? Porque cuando tus finanzas están sanas, puedes enfocarte en lo que te mueve: pasar tiempo con tu familia, cumplir tus sueños y hasta darte esos gustitos sin que te suden las manos cada vez que abres la app del banco.&nbsp;&nbsp;Lo mejor de todo es que no necesitas varita mágica para lograrlo, solo buenos hábitos y constancia.&nbsp;&nbsp;<h2>Los enemigos silenciosos de tu bolsillo&nbsp;</h2>Primero hay que ponernos sinceros y descubrir qué le está haciendo hoyos a tu cartera. Porque, como dicen las abuelitas: “el que no conoce sus males, no puede curarlos”. Aquí van algunos clásicos:&nbsp;<ul><li>El gasto hormiga: Esos cafecitos, las papas de botana, o esa suscripción al streaming que ni ves. Pequeños, pero constantes, se llevan más de lo que crees.&nbsp;</li><li>Vivir al día: Si no tienes un guardadito, cualquier imprevisto (como una llanta ponchada o el dentista) te puede sacar canas verdes.&nbsp;</li><li>Tarjetas de crédito sin control: Son útiles, sí, pero si las usas como extensión de tu sueldo, terminas pagando más intereses que lo que costó el producto, así que aguas.&nbsp;&nbsp;</li><li>Cero planeación: Si no tienes un plan, el dinero se te va como agua entre las manos.&nbsp;</li></ul>¿Te sonó algo familiar? ¡No te preocupes! Aquí te decimos cómo mejorar tu relación con el dinero.&nbsp;&nbsp;<h2>Tips para mejorar tu salud financiera&nbsp;</h2>Ahora sí, entremos en materia. Estos consejos son como el suero para revivir a tu cartera:&nbsp;&nbsp;Conoce tus números como conoces tus memes favoritos&nbsp;Haz un diagnóstico financiero. Es como pesarte después de diciembre: ¿Cuánto ganas? ¿Cuánto gastas? ¿Cuánto debes? Tener el panorama claro es el primer paso para tomar decisiones inteligentes.&nbsp;&nbsp;Haz un presupuesto (Y dale con el presupuesto, bineo)&nbsp;El presupuesto no es un castigo divino, es tu compa. Divide tu dinero en categorías:&nbsp;&nbsp;<ul><li>Gastos fijos&nbsp;</li><li>Ahorro&nbsp;</li><li>Diversión&nbsp;&nbsp;</li><li>Objetivos&nbsp;</li></ul>&nbsp;Arma tu colchón financiero (no el de la cama)&nbsp;Porque la vida es impredecible y nunca sabes cuándo va a llover sobre mojado. La idea es juntar mínimo tres meses de tus gastos básicos. Empieza con poquito, lo importante es no dejar de meterle al ahorro.&nbsp;&nbsp;&nbsp;Fija metas que te motiven&nbsp;Ahorrar sin un propósito es como correr sin meta: te esfuerzas, pero no sabes a dónde vas. Para que tu ahorro realmente funcione, define objetivos claros.&nbsp;&nbsp;¿Quieres un viaje a la playita, cambiar de coche o salir de deudas? Ponle nombre, cantidad y fecha a cada meta para hacerla tangible y motivarte más.&nbsp;Con Pockets bineo organizar tu dinero por objetivos es facilísimo. Puedes crear uno para cada meta, ver tu progreso en tiempo real y asegurarte de que cada peso que ahorres tenga un destino claro.&nbsp;&nbsp;Así, en vez de solo soñar con ese viaje o esa compra importante, te acercas a hacerlo realidad de manera organizada y sin estrés (además que te dan rendimiento anual de 75% CETES).&nbsp;&nbsp;&nbsp;Caza al gasto hormiga&nbsp;&nbsp;Haz una lista de esos mini gastos que parecen inofensivos y busca alternativas. ¿Café diario? Hazlo en casa. ¿Suscripciones que ni usas? ¡Bye! A fin de mes, esos cambios se notan.&nbsp;&nbsp;Constancia: la clave del éxito&nbsp;Mejorar tu salud financiera no es como ganar la lotería, toma tiempo. Es un proceso, como aprender a hacer tortillas sin que se rompan.&nbsp;&nbsp;Habrá días donde te sientas que ya dominaste el arte del ahorro y otros donde quieras tirar la toalla, pero lo importante es seguirle. Celebra tus logros, aunque sean pequeños. ¿Ahorraste cien pesos esta semana? ¡Bien ahí! Todo suma.&nbsp;&nbsp;Hoy es el mejor día para empezar&nbsp;Mejorar tu relación con el dinero puede sonar como misión imposible, pero no lo es. Recuerda que hasta el maratón más largo empieza con un paso.&nbsp;&nbsp;Si haces del dinero tu aliado y no tu enemigo, verás cómo cambia tu vida. Anímate a dar ese primer paso hoy, revisa tus gastos, haz un presupuesto o fija una meta.&nbsp;&nbsp;Tu yo del futuro te lo va a agradecer, créenos.&nbsp;

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¿Qué es la salud financiera?

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Cultura

Si sientes que cada fin de semana tu cartera sufre un infarto, es momento de encontrar hobbies que no te dejen en la quiebra. Divertirse no tiene por qué ser caro, y hoy te traemos una lista de actividades que son amigables con tu cartera y con tu felicidad.&nbsp;&nbsp;<h2>Para quienes tienen alma de artista&nbsp;</h2><ul><li>Dibujo y pintura: Solo necesitas una libreta y cualquier lápiz o pluma que tengas a la mano. Si te animas a usar acuarelas o crayones, hay opciones baratas que funcionan de maravilla&nbsp;</li><li>Escritura: Desde cuentos cortos hasta poesía, escribir es un hobby que solo requiere papel, pluma y mucha imaginación&nbsp;</li><li>Manualidades con reciclaje: Usa cartón, botellas, retazos de tela... Tu creatividad y un par de tutoriales en internet harán el resto&nbsp;</li></ul>&nbsp;<blockquote>Tip de ahorro: Checa en internet tutoriales gratis y usa lo que ya tienes en casa. No necesitas materiales de lujo para crear arte.&nbsp;</blockquote>&nbsp;<h2>Para quienes siempre están en movimiento&nbsp;</h2><ul><li>Senderismo o caminatas urbanas: Explora parques, camina por el centro de tu ciudad o descubre rutas nuevas&nbsp;</li><li>Baile en casa: Pon tu música favorita y dale con todo. Hay miles de tutoriales gratuitos para que saques los prohibidos sin gastar de más&nbsp;</li><li>Ejercicio sin gym: Usa tu propio peso con rutinas de calistenia o yoga. Youtube es tu mejor aliado aquí&nbsp;</li></ul>&nbsp;<blockquote>Tip de ahorro: Descarga apps gratuitas de entrenamiento y sácale provecho a los espacios públicos.&nbsp;</blockquote>&nbsp;<h2>Para quienes son más tranquis&nbsp;</h2><ul><li>Lectura: Bibliotecas públicas, intercambios de libros y PDFs gratuitos son grandes aliados&nbsp;</li><li>Meditación: No necesitas nada, solo un lugar tranquilo y ganas de respirar profundo&nbsp;</li><li>Cuidado de plantas: Puedes empezar con plantas de fácil mantenimiento, así no sentirás que tienes que cuidar un pollito de colores&nbsp;</li></ul>&nbsp;<blockquote>Tip de ahorro: Busca clubes de lectura gratuitos o usa apps como Kindle para acceder a e-books sin costo&nbsp;</blockquote>&nbsp;<h2>Para quienes disfrutan en compañía&nbsp;</h2><ul><li>Juegos de mesa: Hay apps gratuitas de ajedrez, cartas y otros clásicos&nbsp;</li><li>Trueques y bazares: Intercambia ropa, libros o cualquier cosa con amigos o en grupos de Facebook&nbsp;</li><li>Voluntariado: Ayudar a los demás es gratis y da una gran satisfacción&nbsp;</li></ul>&nbsp;<blockquote>Tip de ahorro: Organiza reuniones en casa en lugar de salir a lugares caros. Juegos de mesa, karaoke o hasta noches de películas pueden ser un gran plan.&nbsp;</blockquote>&nbsp;<h2>Para quienes aman la tecnología&nbsp;</h2><ul><li>Aprender un idioma: Hay apps gratuitas, échales un ojo y descubre la que más se adapte a ti&nbsp;&nbsp;</li><li>Podcasts y documentales: Mucho entretenimiento sin gastar un peso&nbsp;</li><li>Edición de fotos y videos: Usa programas gratuitos, también lánzate a YouTube, hay miles de tutoriales para que tus videos y fotos estén super aesthetic&nbsp;</li></ul>&nbsp;<blockquote>Tip de ahorro: Aprovecha cursos gratuitos en plataformas como Coursera o Udemy para aprender algo nuevo sin pagar.&nbsp;</blockquote>&nbsp;<h2>Ahorra mientras disfrutas con pockets&nbsp;</h2>Tener hobbies no significa descuidar tus finanzas. Con bineo, puedes organizar mejor tu dinero y destinar un fondo especial para tu entretenimiento sin afectar tus gastos esenciales. <a href="https://www.bineo.com/cuenta-bineo">Crea un pocket</a> exclusivo para tus hobbies y asigna un monto fijo cada mes. Así, te aseguras de disfrutar sin culpa ni desajustar tu presupuesto.&nbsp;&nbsp;<blockquote>Tip de ahorro: Usa tus Pockets bineo para planear y ahorrar con anticipación, así evitarás gastos impulsivos y podrás darte esos gustitos de manera inteligente.&nbsp;</blockquote>&nbsp;<h2>¿Le entras al ahorro?&nbsp;</h2>Ya ves, no necesitas gastar una fortuna para encontrar un hobby que te apasione. Solo es cuestión de probar y ver cuál se adapta mejor a tu estilo de vida.&nbsp;Y tú, ¿ya tienes un hobby barato y divertido? Si no, ¡es momento de encontrarlo!&nbsp;

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Estos hobbies no te harán gastar de más

¿Te acuerdas cuando tu abuela te regalaba dinero a escondidas de todos? Qué aliviane para tu cartera. Si era un refresco o un juguete, una lanita extra siempre caía (y cae bien).&nbsp;&nbsp;¿Pero qué pasa si ese y otros consejos los llevas a la vida adulta? Recuerda que a las abuelas nunca les faltaba nada y de comida, ni se diga...&nbsp;&nbsp;Recordemos sus sabios tips para ponerlos en práctica.&nbsp;&nbsp;&nbsp;<h2>Aprender de la experiencia es un valor único&nbsp;</h2>Bien dicen por ahí - “Más sabe el diablo por viejo que por diablo”, y no porque necesariamente tu abuela sea un ente maligno sabe más que tú, sino porque la experiencia le ha enseñado muchas cosas.&nbsp;&nbsp;La vida se trata de prueba y error, conforme pasan los años, vamos aprendiendo más y más.&nbsp;&nbsp;Es lo mismo con tus finanzas, ¿recuerdas cuando ibas al kinder y 10 pesos te parecían una fortuna? Ahora que creciste, te diste cuenta de que hoy en día, no alcanzan para mucho. Aunque con una buena administración, sirven demasiado.&nbsp;&nbsp;&nbsp;<h2>No gastes lo que no tienes&nbsp;</h2>¿Alguna vez oíste a tu abuela decir “YOLO”? ¡Pues no! O sea, sí, solo se vive una vez, pero se trata de vivir bien, con tranquilidad y estabilidad financiera. Puede parecer difícil, pero es posible lograrlo.&nbsp;&nbsp;&nbsp;<h2>¿Y cómo le hago?&nbsp;</h2>La clave está en saber administrar tu lana. Imagina que tienes ingresos mensuales de $10,000 MXN, pero te diste un gusto de $8,000 MXN en ropa... ¡No la vas a armar!&nbsp;&nbsp;De los $2,000 MXN restantes tienes que pagar $5,000 MXN de renta y una despensa mínima de $1,500 MXN eso sin sumar servicios, transporte, etc.&nbsp;Primero lo primero, debes priorizar lo esencial para vivir, ya que hayas cubierto esos gastos, es hora de pensar en los gustos.&nbsp;&nbsp;&nbsp;<h2>Ahorra para los días nublados&nbsp;</h2>Tu abuela siempre te decía: “más vale prevenir que lamentar”. La vida, a veces, nos da sorpresas inesperadas y es importante prepararse para esos momentos.&nbsp;&nbsp;<ul><li>Aparta 10% de tus ingresos: Aunque parezca poco, con el tiempo se convierte en un colchón que te salva de imprevistos&nbsp;</li><li>Metas pequeñas, logros grandes: Empieza guardando el dinero que gastarías en antojitos. Con el tiempo, verás cómo esa lana se multiplica&nbsp;</li></ul>Con un fondo de emergencia vas a enfrentar esos momentos sin tener que recurrir a préstamos o, peor aún, a pedirle lana a amigos o familiares. Un peso ahorrado hoy, es tranquilidad mañana.&nbsp;&nbsp;<h2>Compartir con los demás: La generosidad que siempre da sabor&nbsp;</h2>El verdadero valor no se mide solo en la cantidad de dinero acumulado, sino en la capacidad de compartirlo. Con la misma calidez con que la abuela preparaba su receta secreta, ella demostraba que compartir fortalecía los lazos familiares.&nbsp;<ul><li>La importancia de la generosidad: Siempre había un lugar para apoyar a quien lo necesitaba, ya fuera con un pequeño préstamo o invitando a la familia a disfrutar de una comida casera&nbsp;</li><li>El valor de la solidaridad: Compartir, según sus enseñanzas, no era solo un acto económico, sino un gesto de amor y compromiso con la familia&nbsp;</li><li>Multiplicar el bien: La filosofía de la abuela era que el dinero que se comparte se multiplica en forma de gratitud y unión, creando una red de apoyo invaluable&nbsp;</li></ul>Esta lección va más allá de las finanzas personales: es una invitación a vivir en comunidad, a tender la mano a quien lo necesite y a recordar que, al final del día, lo más valioso es el bienestar compartido.&nbsp;&nbsp;<h2>¿Puedo cambiar la forma en que manejo mis finanzas? Sí puedes&nbsp;</h2>Las lecciones de la abuela sobre el dinero trascienden el simple manejo financiero. Son vivencias llenas de cariño, donde cada anécdota y cada dicho demuestran que, con organización, ahorro, inversión, celebración y generosidad, es posible transformar cómo manejas tu dinero.&nbsp;&nbsp;Al poner en práctica estos consejos, se crea una base sólida que permite disfrutar de la vida con la misma calidez y sabor que se encuentra en sus recetas.&nbsp;La abuela siempre dejó claro que el verdadero valor está en aprender de la experiencia y en compartir esa sabiduría para que las futuras generaciones puedan disfrutar de una vida financiera tan estable y rica en amor como un buen pozole en invierno.&nbsp;

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Lecciones de la abuela sobre el dinero 

Hablar de dinero y felicidad es como discutir si la pizza con piña es una genialidad o un crimen culinario: todos tienen una opinión.&nbsp;&nbsp;Algunos dicen que el dinero no compra la felicidad, pero otros aseguran que prefieren llorar en un auto de lujo que en el transporte público. Entonces, ¿quién tiene razón? Platiquemos.&nbsp;&nbsp;<h2>¿El dinero realmente compra la felicidad?&nbsp;</h2>La ciencia ha intentado responder esta pregunta por años. Un estudio de la Universidad de Princeton sugiere que ganando alrededor de los $75,000 dólares anuales (en EE.UU.) sí da felicidad. Después de esa cifra, la felicidad no aumenta de manera significativa. (<a href="https://www.eleconomista.es/economia/noticias/12384574/07/23/un-estudio-de-la-academia-nacional-de-ciencias-responde-a-si-el-dinero-compra-la-felicidad.html">Fuente: El Economista</a>)&nbsp;Pero, ojo, esto no significa que el dinero no tenga impacto. Tener suficiente para cubrir necesidades, reducir el estrés financiero y darnos ciertos gustos sí influye en nuestro bienestar.&nbsp;<h2>Lo que el dinero sí puede comprar (y que nos hace felices)&nbsp;</h2>No vamos a mentir: el dinero ayuda. No es lo mismo vivir con preocupaciones constantes por las cuentas que tener estabilidad económica. Algunas cosas que el dinero puede comprar y que sí impactan en nuestra felicidad incluyen:&nbsp;<ul><li>Experiencias en lugar de cosas: Viajes, conciertos y cenas con amigos nos dejan recuerdos valiosos&nbsp;</li><li>Tranquilidad financiera: No preocuparse por pagar la renta o la luz quita un peso enorme de encima&nbsp;</li><li>Tiempo libre: Delegar tareas como limpieza o transporte nos da más tiempo para disfrutar la vida&nbsp;</li><li>Salud y bienestar: Acceder a buenos servicios de salud y alimentación mejora la calidad de vida&nbsp;</li></ul>&nbsp;<h2>El punto donde el dinero deja de hacer diferencia&nbsp;</h2>Si bien tener dinero ayuda, hay un punto en el que la felicidad ya no depende de lo que tienes en la cartera.&nbsp;Ganar millones no garantiza plenitud si no tienes buenas relaciones, propósito o bienestar emocional. Es aquí donde entran otros factores clave de la felicidad:&nbsp;<ul><li>Relaciones significativas&nbsp;</li><li>Salud mental&nbsp;</li><li>Propósito y sentido de vida&nbsp;</li><li>Tiempo de calidad para disfrutar&nbsp;</li></ul>&nbsp;<h2>Entonces, ¿el dinero es la clave de la felicidad o solo ayuda?&nbsp;</h2>La respuesta es un poco de ambas. No garantiza la felicidad absoluta, pero facilita muchas cosas que sí nos hacen felices. La clave está en cómo lo usamos: si lo enfocamos en experiencias, estabilidad y bienestar, tendrá un impacto positivo.&nbsp;&nbsp;<h2>Consejos para usar el dinero a favor de tu felicidad&nbsp;</h2><ul><li>Invierte en experiencias: Un concierto con amigos te hará más feliz que otro par de zapatos&nbsp;</li><li>Elimina el estrés financiero: Ten un fondo de emergencia para dormir en paz&nbsp;</li><li>Usa el dinero para ahorrar tiempo: Pagar por comodidad (como un servicio de limpieza) te da más libertad&nbsp;</li><li>Gasta en los demás: Ayudar a otros o hacer regalos genera felicidad duradera&nbsp;</li><li>No te obsesiones con tener más: Disfruta lo que ya tienes y encuentra balance&nbsp;</li></ul>&nbsp;<h2>La importancia de ahorrar y tener buenos hábitos financieros&nbsp;</h2>Si bien el dinero no es la única clave de la felicidad, tener buenos hábitos financieros nos da tranquilidad y nos permite enfocarnos en lo que realmente importa.&nbsp;&nbsp;Ahorrar no solo es una estrategia para emergencias, sino una forma de garantizar que podamos disfrutar del presente sin comprometer el futuro.&nbsp;Llevar un presupuesto, evitar deudas innecesarias y planificar inversiones inteligentes son pasos esenciales para alcanzar estabilidad y bienestar.&nbsp;&nbsp;Tener una buena relación con el dinero significa usarlo de manera consciente, sin gastar por impulso ni vivir al día sin pensar en mañana.&nbsp;En resumen: el dinero no compra la felicidad, pero la hace más accesible. Así que gástalo sabiamente, ahorra con inteligencia y disfruta la vida.&nbsp;

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El dinero y la felicidad: ¿la compra o solo la facilita? 

Si alguna vez te ha sonado el teléfono y, al contestar, escuchas una voz desconocida diciéndote con tono muy serio: “Le hablamos del banco…”, seguro te ha pasado por la cabeza una de dos cosas: “¿Ahora qué hice?” o “¡Ay, nanita, esto suena raro!”.&nbsp;&nbsp;Y con justa razón, porque, aunque a veces sí pueden ser llamadas legítimas, otras tantas esconden una trampa.&nbsp;Los estafadores son como los primos incómodos en las reuniones familiares: aparecen de la nada, te hacen preguntas raras y al final solo quieren sacarte algo.&nbsp;&nbsp;Pero aquí no estamos para dejarnos engañar. En esta infografía te vamos a contar cómo identificar esas llamadas sospechosas, qué datos NUNCA debes dar y qué hacer si alguien intenta colgarte un fraude por teléfono.&nbsp;&nbsp;Porque aquí, la única persona que debería sorprenderte con una llamada inesperada es tu crush… y hasta eso es debatible. &nbsp;<img src="https://cdn-prd.bineo.com/bineo-site-232/assets/estafas_por_celular_2e9a86da4b.png" alt="estafas-por-celular.png">

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